La motivación

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Publicada el 21/05/20

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Cuando los alumnos están motivados para aprender adquieren de forma natural las destrezas que necesitan para llevar a cabo lo que se proponen. Y su dominio de ellas es cada vez mayor a medida que sus ambiciones creativas se expanden. Ken Robinson.

La palabra motivación proviene del latín y significa “para promover”. Los psicólogos definen la motivación como la necesidad o el deseo que activa y dirige nuestro comportamiento.

Las personas necesitamos de esta motivación para llevar a cabo nuestras tareas con éxito, todos nuestros actos conllevan una motivación, se trata de un principio básico de la conducta humana, nadie realiza una tarea sin una razón para ello. El hecho de estar motivados/as nos ayuda a realizar la tarea sin que suponga una gran carga su realización. Obviamente deberemos tener en cuenta el grado de motivación por la tarea, ya que la importancia que le dé la persona a la tarea será lo que dé como resultado el diferente grado de motivación por realizarla. Igual que las necesidades humanas descritas por Maslow tienen sus tipos, la motivación también.

Existen diferentes tipos de motivación:

Motivación extrínseca: los estímulos que motivan a la persona vienen de fuera, se trata de recompensas externas.

Motivación intrínseca: la motivación proviene del interior, se asocia a deseos de autorrealización y crecimiento personal, se relaciona con el placer que siente la persona al realizar la actividad. Lo que Csikszentmihalyi denominó Estado de Flujo o Flow.

Motivación positiva: una persona realiza la actividad gracias a que obtendrá una recompensa positiva, indiferentemente de que sea externa o interna.

Motivación negativa: la persona realiza la actividad para evitar una consecuencia desagradable, tanto externa como interna.

Motivación básica: se refiere al grado de compromiso que se tiene con una actividad, es muy usada en el mundo deportivo.

Motivación cotidiana: hace referencia al interés por la actividad diaria y la gratificación inmediata que se recibe.

Motivación centrada en el ego: se refiere a la comparación, una persona se compara con otra y siente motivación porque ve que puede destacar.

Motivación centrada en la tarea: depende de los retos personales y los resultados, la motivación nace de la impresión que se hace la persona de su progreso y del dominio en la tarea realizada.

Motivación homeostática: intenta explicar la conducta a través de la satisfacción de las necesidades más primarias.

Motivación emocional: como se deduce de su nombre tiene que ver con las emociones que siente la persona, una conducta puede estar motivada por algún trauma, necesidades de apego, soledad….

¿Cómo conseguimos que los niños/as estén motivados?

Sin motivación no hay aprendizaje, por lo que debemos facilitar que los niños/as estén motivados para que alcancen sus metas y consigan un aprendizaje significativo. Debemos comenzar conociendo a esos pequeños/as sabiendo qué les gusta, es más, qué les apasiona y utilizarlo para su aprendizaje, es necesario que ellos experimenten y vayan descubriendo, haciéndoles así participes de su aprendizaje, las oportunidades de aprendizaje deben ser variadas, y no limitadas a un solo espacio, como podría ser el aula.

Sus vivencias son importantes, y las podemos utilizar para el aprendizaje, es necesario relacionar lo que están aprendiendo con su vida cotidiana, para que observen la utilidad de sus aprendizajes.

No olvidemos que las nuevas tecnologías están ahí, y pueden ayudar mucho en el aprendizaje, las tecnologías nos van a robar la atención de los infantes, utilicémoslas a nuestro favor. Existen variedad de recursos tecnologías que podemos usar (Grapho Game, Number Race, EDpuzzle, Kahoot…)

Durante el aprendizaje siempre hay objetivos que alcanzar, estos deben ser lo suficientemente difíciles para provocar un esfuerzo y que salgan de su zona de confort, pero también realistas para que no acaben frustrándose y perdiendo toda la motivación, y por supuesto, una vez alcanzado el objetivo y mientras se llega a él utilizar el refuerzo positivo, con refuerzo positivo no nos referimos a darles una chuchería cada vez que logra algo, un simple gesto o una palabra de reconocimiento es mucho más efectivo que cualquier gominola.

Su curiosidad innata es nuestra mejor herramienta, debemos intentar que se hagan preguntas de porque las cosas son como son, no necesitamos que aceptan la idea base que le ofrece el docente, es vital que los niños/as se hagan preguntas y quieran descubrir cosas nuevas por sí mismos, dejémosles trabajar en equipo, y que sean ellos los que den la clase.

Por último, ¡intenta sorprenderles, siempre!, si no saben lo que les espera estarán expectantes y con muchas ganas de aprender.